La esterilización es un marcador importante de la calidad de una clínica dental ya que no se basa en marketing superfluo, sino en la calidad propiamente dicha y en la rigurosidad de todos y cada uno de los procesos que va a llevar a cabo. Por ello, te animamos a que siempre te informes de cuál es el protocolo que sigue la clínica de ortodoncia que te va a tratar.
Para nuestra consulta, la seguridad y salud de nuestros pacientes es muy importante y primordial. Por ello, en Lorente Ortodoncia seguimos un proceso riguroso y protocolarizado a la hora de esterilizar el material que empleamos durante las visitas al ortodoncista.
¿Qué fases seguimos en nuestro proceso de esterilización?
- Durante el ciclo de esterilización, el instrumental pasa inicialmente por un cepillado manual.
- A continuación, se introduce en el glutaraldehído, que es un desinfectante.
- Luego pasa a una termodesinfectadora (un aparato semejante a un lavavajillas con el agua mucho más caliente de lo normal).
- Una vez se saca de esta máquina, es necesario embolsar el material de manera individualizada según los procesos para los que lo vayamos a utilizar.
- Finalmente, se introduce en el autoclave Melag Cliniclave 45, una máquina de uso hospitalario que aumenta todavía más la seguridad y fiabilidad en la esterilización.
- Para asegurarnos que los ciclos de esterilización se han efectuado correctamente, introducimos en cada ciclo unas ampollas de esporas o cepas biológicas que, una vez finalizado éste, se incuban. Hasta que no comprobamos tras la incubación que todas esas esporas están muertas u obsoletas, no se pone el material en el circuito de la clínica.
En nuestra clínica de ortodoncia de Zaragoza, siempre abrimos la bolsa esterilizada con el material sanitario delante del paciente. ¡Exígelo siempre, independientemente de dónde te trates!
Como podéis ver, la esterilización es una realidad protocolorizada y estandarizada en nuestra consulta de la que nos sentimos muy orgullosos.