Cuidar la salud dental de los niños desde que son pequeños es fundamental para evitar que en el futuro puedan aparecer problemas bucodentales.
Por lo general, a excepción de la higiene dental diaria, no le damos a la salud dental la importancia que merece, y en etapas de crecimiento aun se debe prestar más atención a este aspecto.
Las visitas al dentista en edades tempranas sí son cada vez más frecuentes, pero acudir al ortodoncista desde pequeños no está tan extendido como debería.
En nuestra clínica, como referentes en ortodoncia infantil en Zaragoza, llevamos más de 30 años cuidando de la salud dental de los niños, y queremos informarte de los casos en los que tus hijos deben acudir al ortodoncista.
5 casos en los que un niño debe ir al ortodoncista
Primera visita
Independientemente de la alineación de los dientes del niño, es recomendable una primera visita con el ortodoncista sobre los 6-7 años de edad. En esta primera visita, un ortodoncista infantil evaluará las condiciones dentales del pequeño para ver si todo transcurre según lo previsto y, el en caso de no ser así, se planteará una solución temprana para corregir el problema funcional.
Malposición dental
La posición errónea de los dientes se puede percibir en muchos casos de manera visual y es un motivo más que suficiente para acudir al ortodoncista. La malposición dental puede desequilibrar la mordida del niño, dificultar la higiene dental y, como consecuencia de todo ello, aumentar las posibilidades de sufrir una enfermedad dental (como la caries) o periodontal.
El apiñamiento dental, situación en la que los dientes se amontonan unos encima de otros, es uno de los problemas de malposición dental más comunes y la ortodoncia interceptiva es el tratamiento ideal para solucionarlo.
Erupción de los dientes
Tanto en la erupción de los dientes de leche como en la erupción de los definitivos, es frecuente que el niño sufra desequilibrios dentales. Pese a lo que comúnmente creen algunas personas, los dientes de leche influyen directamente en la dentición permanente, y por ello, es importante realizar una vigilancia del recambio dentario periódica.
Por otro lado, la pérdida muy temprana de un diente de leche, puede provocar que las demás piezas dentales se muevan hacia el hueco vacío o que se desvíe la línea media, lo que podría repercutir en la salud dental del niño, siendo necesario valorar llevar a cabo un tratamiento de ortodoncia.
Problemas con la mordida
El principal motivo para el inicio de un tratamiento de ortodoncia es la maloclusión dental. La mordida cruzada anterior, en la que los dientes superiores se colocan por detrás de los inferiores, o la mordida abierta, en la que la arcada dental superior y la inferior se quedan muy separadas al morder, son algunas de las maloclusiones dentales más comunes.
Crecimiento del maxilar
Para que los dientes erupcionen adecuadamente, es necesario que dispongan de espacio para ello. En edades tempranas, es posible corregir el crecimiento inadecuado de los huesos mediante ortopedia, mejorando la calidad de vida del niño y evitando que se tenga que someter a un tratamiento o incluso a una intervención quirúrgica compleja en el futuro.