El mundo de la ortodoncia se encuentra lleno de mitos que, como expertos en Ortodoncia en Zaragoza, nos vemos en la obligación de clarificar o desmentir. Es fundamental que futuros pacientes que necesiten un tratamiento no retrasen su decisión por miedo o dudas sobre los efectos que éste pueda generar en su salud bucodental.
Existe la falsa creencia que afirma que los sistemas de ortodoncia producen recesión gingival: retracción de encías que deja al descubierto la raíz y otras partes del diente.
¿Qué es la retracción gingival?
La retracción gingival es una patología que se materializa con la pérdida de superficie de encía. Esto da lugar a la exposición de la raíz dentaria provocando problemas estéticos y funcionales.
Aunque pueda parecer en un principio una simple consecuencia del envejecimiento o edad adulta, no siempre es así. La retracción gingival es un proceso degenerativo y gradual que puede padecerse a cualquier edad, que depende en gran medida de la posición del diente con respecto a su base ósea y gingival y que debe abordarse de forma profesional.
Las raíces de los dientes están dentro de un hueso, es decir, dentro del proceso dentoalveolar de una arcada dentaria maxilar o mandibular. Esta arcada dentaria tiene forma de herradura, siendo lo ideal que los dientes estén dentro de ésta. Sin embargo, hay personas que tienen los dientes demasiado protruidos o inclinados con respecto a su hueso dentoalveolar. Estas personas tienen más posibilidades de tener retracción de encías. También influirá el biotipo de encía, las encías finas son más sensibles a las retracciones que las gruesas.
Sin embargo, un buen diagnóstico y tratamiento de ortodoncia en un paciente de este tipo debería disminuir el riesgo de retracciones gingivales y no empeorarlas. Esto se conseguiría disminuyendo la protrusión de los dientes, empujándolos dentro del proceso dentoalveolar. Este hecho, no exime de que, en un futuro con el propio envejecimiento, el paciente sufra alguna retracción gingival.
Diferencia entre retracción de encías y enfermedad periodontal
Es frecuente que los pacientes relacionen tener retracción de encías con el hecho de presentar enfermedad periodontal, sin embargo, es muy común tener retracción de encías sin tener enfermedad periodontal.
Es frecuente encontrar retracciones de encías en bocas sanas, sin embargo, la enfermedad periodontal es una enfermedad crónica que puede conducir además de a la pérdida de encía, también a la pérdida del hueso que sujeta de los dientes.
Es decir, en una retracción de encías podemos ver pérdida de encía o ligera perdida ósea vestibular mientras que en la enfermedad periodontal suele haber inflamación gingival con pérdida de encía y hueso de forma generalizada.
En caso de que el paciente presente enfermedad periodontal, ésta tiene que estar controlada por su periodoncista antes de comenzar tratamiento de ortodoncia.
El inicio de un tratamiento de ortodoncia fija convencional con un padecimiento sin abordar previo de enfermedad periodontal puede agravar la recesión de encías que ya de por sí se esté padeciendo. Este es uno de los motivos por los que en Lorente Ortodoncia siempre comenzamos nuestros tratamientos con un estudio diagnóstico en profundidad que nos permita evaluar el estado de la boca de cada paciente.
Para poder garantizar que el resultado final de un tratamiento concluirá con éxito, primero el paciente debe contar con una óptima salud bucodental. Así, la transformación de una sonrisa será un camino mucho más amable y seguro. La planificación del tratamiento y la buena supervisión del desarrollo del mismo reducen al máximo las probabilidades de sufrir cualquier complicación o anomalía.
La información siempre es la mejor ayuda para saber tomar la decisión correcta. En Lorente Ortodoncia te asesoramos y aclaramos tus dudas. Llámanos y pide cita para que podamos valorar tu caso. ¡Estaremos encantados de recibirte en nuestra Clínica de Ortodoncia en Zaragoza!